Entrevista a Leonor Martín Monge (escrita y traducida)
Joan Escofet, de Vilassar Ràdio, entrevistó a Leonor Martín Monge el pasado 3 de marzo en pleno lanzamiento de su primer libro El sentimiento del intestino y con ello, la compartimos traducida a continuación.
– JE: Leonor Martín nos presenta un libro que a mí me ha hecho mucha ilusión leer y que seguramente de alguna manera nos puede cambiar a todos, no sé si la vida, pero al menos la manera de entender nuestro cuerpo y de ayudarnos a poner remedios a situaciones que nos cuesta encontrar. ‘El sentimiento del intestino’ es su trabajo, en el que presenta una serie de sensaciones y una recopilación de los más de 33 años de experiencia dedicada al mundo del nutricionismo, de la enfermería, etc. ¿Qué podemos encontrar en ‘El sentimiento del intestino’?
LM: ‘El sentimiento del intestino’ es una recopilación de toda mi experiencia trabajando con el intestino, interconectando con él y entendiéndolo. Y dar conocimiento a la persona de lo que realmente es para el ser humano.
– JE: De entrada el título llama la atención ‘El sentimiento del intestino ‘, ya nos planteas como mínimo una duda, o unas ganas de saber más. ¿El intestino tiene sentimiento?
LM: El intestino es el reflejo del sentimiento de la persona. Es decir, cuando una persona tiene un bloqueo o tiene un disgusto, puede hacer una diarrea o puede hacer un estreñimiento. Aquí ya tenemos que empezar a pensar qué está pasando. Cuando esto ocurre, cuando esto realmente lo vemos con respuesta en nuestro cuerpo, nos debemos dar cuenta, que el intestino es un segundo cerebro. De hecho, está demostrado científicamente por diferentes investigadores y detrás ha habido un profundo estudio.
Un estudio donde se ha demostrado que los neurotransmisores cerebrales están conectados a través neuronal en el cerebro. El neurotransmisor más importante que siempre se habla, una hormona que se segrega, la del estrés: la serotonina. La dopamina es la que se afecta cuando una persona tiene Parkinson. Y la acetilcolina, la histamina cuando hay una alergia, el Gaba. Todo esto, cuando estás relacionado con una terapia que trata el intestino, te das cuenta perfectamente que es verdad.
Y en el libro hago una mención muy importante que nosotros tenemos que ser capaces de entendernos a nosotros mismos y a través del intestino. Todo el mundo me dice y por qué ‘El sentimiento del intestino’. Porque cuando una persona se encuentra muy mal, lo primero que hace es: o no va de vientre, o va de diarrea. Y esto es algo que se debe tener en cuenta. Observar el ritmo de deposición, observar el horario de ésta, observar lo que comemos y al cabo de un tiempo tenemos una reacción en el intestino. Esto es importantísimo. Y como decía Hipócrates en sus tratados, bis natura medicatrix, si el cuerpo tiene la suficiente fuerza para enfermar, también la debe tener para curarse. Y este es el trabajo que hacemos en el Centre SPAL: hacemos tomar conciencia al paciente de dónde está, dónde se encuentra y lo hacemos consciente, y le damos las herramientas posibles para que esa persona comience con su propia curación.
– JE: Hablas de 3 etapas en tu Método Detox.
LM: Así es. La primera etapa es una valoración integral de cómo está el paciente, una toma de conciencia. La segunda es la detoxificación, las cuatro limpiezas con las pautas de nutrición adecuadas para cada paciente. Y al final viene la regeneración de la flora intestinal y el mantenimiento.
– JE: Más allá de la simple enfermedad hay un acompañamiento al paciente, un entenderlo, ¿es así?. Las curaciones deben ser espectaculares.
LM: Exactamente, a través de los más de 30 años que lo practico, como enfermera, fisioterapeuta y comadrona, he llegado a entender el intestino de una manera muy gráfica. He constatado que cuando trabajamos el intestino abrimos cuatro centros energéticos. Los hindúes los llaman chacras, los osteópatas diafragmas, y yo le digo centro energético porque mi experiencia es la Bioenergética, que es la biología de la energía del cuerpo.
Cuando trabajo el intestino, abro completamente. La parte sexual, la familiar, la del yo con el exterior y la del sentimiento de impotencia que siente una persona en un momento determinado, que luego nos evoca a una diabetes. Tan sencillo como eso.
– JE: Estas explicaciones nos argumentan un poco el título. Va bien que nos las hagas, de este modo tan didáctico que tienes de hablar porqué realmente es la filosofía que hay dentro de este libro.
LM: Es mi filosofía y es la observación durante tanto tiempo, y ver al paciente como está sufriendo y de repente ves como está disfrutando, y cuando se va del centro, cuando se va de haber hecho nuestras terapias, se va feliz. Y esto es lo básico. Para nosotros es básico. Y esto es el intestino. Porque “si tú cagas a gusto, tú eres feliz”. Si no vas bien de vientre, no sabes qué te pasa. No duermes, no te nutres, tienes la boca seca, tienes mareo, mal humor, y un largo etcétera.
– JE: Siempre apostando por las terapias naturales. Una gran defensora.
LM: Yo soy enfermera de base, enfermera de Cruz Roja, y esto es algo que llevaré siempre dentro. La medicina convencional no la desestimaré nunca, porque en un momento dado se necesita y mucho.
– JE: ¿Pueden las dos medicinas ser complementarias?
LM: Totalmente, yo intento complementarlas. Porque no olvidemos que detrás de la medicina convencional hay personas que están doctoradas en ciencias. Pero yo sólo pido una cosa a la medicina convencional, y es que tiene que haber más terapéutica. Existen entre otras medicinas, la farmacología, también la gran diagnóstica y la microcirugía que es fabulosa, pero hemos olvidado la terapéutica. El crear la conciencia en el paciente y la responsabilidad de su propia enfermedad. Que no se tiene que acabar todo con una pastilla. A veces un dolor de cabeza, tomando un poco de bicarbonato, se va. Y una temperatura, si no llegamos a 38º, 38º y medio, hay diferentes maneras de sacarla. O provocar temperatura para que una misma célula pueda eliminar su toxicidad. Esto es muy importante.
– JE: Y siempre explorando vías nuevas. Como el agua de mar, ¿cierto?
LM: Así es, el agua de mar hace muchos años que la uso en mis terapias. Soy fundadora de Prodimar junto con el Sr. Laureano Domínguez y el Dr. Ángel Gracia. Y cofundadora de la Fundación Aqua Maris.
– JE: ¿Conoce la población el agua de mar en los tratamientos?
LM: Ahora empieza a conocerse, pero la gente desconoce mucho el agua de mar. Nosotros, los seres humanos, tenemos entre el 70 y el 80% de agua, y de éste, entre el 70 y el 75% es agua de mar. Que tiene las mismas propiedades que el plasma sanguíneo. ¿Por qué? Porque se ha demostrado que nosotros venimos del agua de mar.
Yo tuve la oportunidad de poner en vena medio litro de agua de mar al presidente de Prodimar, un señor que era hipertenso, y a los 10 minutos vimos que se estabilizó su presión. Con lo cual observamos que se ponía en marcha la bomba de sodio-potasio que nosotros tenemos en la célula. A partir de aquí, se hacen diferentes estudios y se concluye que el agua de mar es super alcalina. Y que es el único elemento de la Tierra que tiene todos los minerales y oligoelementos que existen. Es el único que se regenera al 100%. Y si nosotros utilizamos los cuatro elementos de la Tierra, nos estamos nutriendo. Pero si desestimamos uno de ellos, entonces tenemos carencias.
– JE: Te estoy escuchando muy atentamente y eres una apasionada de tu trabajo.
LM: Exacto, es mi vida. He aplicado mi vida personal y profesional en este libro. Y he intentado hacerlo de lectura rápida, didáctica y explicativa. No puedo poner tratados, teorías… porqué la gente no lo entiende. Pero mi función en este mundo, es entrar en la vida de las personas a través del intestino para poder enseñar el higienismo de una persona. Que esa persona sepa que dejando de comer un día o dos, y depurando su cuerpo con una buena técnica, está haciendo una prevención y a la vez, su curación.
– JE: Leonor, danos cuatro consejos para un buen funcionamiento diario. Para mantener un buen tono con el intestino, un buen tono a la hora de ir al baño.
LM: De entrada intentar no comer muchas cosas procesadas industriales, tenemos que ser un poco prudentes. Comer 50 gramos de pan al día no es nada malo, pero comer medio kilo sí lo es. Por tanto, rebajar las harinas, rebajar casi totalmente los lácteos, ya que el láctico produce un moco, y el moco en el intestino produce inflamación, y si hay inflamación, no se nutre nadie.
Contamos que nosotros por el intestino es por donde nacemos, por donde nos nutrimos y por donde morimos. Es muy interesante saber esto. Otra cosa es saber que un día a la semana, dejar completamente la carne, los huevos, la leche y el pescado, y pasar a comer frutas y verduras crudas. Entonces estamos haciendo un semi ayuno muy bueno.
– JE: De esto también hablas en el libro.
LM: Exacto. Hemos hecho una experiencia (prueba piloto) en el Balneario Termes Orion durante casi un año. Y ha sido una experiencia al 100% buena, para demostrar que con una correcta alimentación, un buen equilibrio emocional y un buen equilibrio de limpieza, una persona se cura. Y se cura ella porque se quiere curar. No hay nadie que cure, si el paciente no se quiere curar. Y esto es otra teoría que quisiera que entrara en la cabeza de la gente.
– JE: Esto es una de la cosas que me ha llamado más la atención, tal vez muchas veces ponemos excesiva confianza en ayudas externas como medicamentos o terapias, pero es algo que quizás empieza dentro de uno mismo. “Yo tengo ganas y allí que voy”. Por cierto, ahora que hablamos de consejos a nivel personal, ¿el papel higiénico tú lo recomiendas?
LM: Estamos en este mundo, en esta sociedad. Yo lo que recomiendo es que se sea higiénico. Incluso hay gente que se hace baños de asiento, y eso sería bueno. Pero cuando vas a un lugar y lógicamente tienes que defecar, entonces se complica. Por lo tanto no pasaría nada. Lo que sí pasa que al ir de vientre sería más bueno la posición de cuclillas. Es más fácil y no fuerzas tanto el intestino. Pero bueno, ya está bien, no lo complicamos.
– JE: Otro de los aspectos de ‘El sentimiento del intestino’, un libro que desde aquí recomendamos porque realmente tienes una visión diferente de cómo funciona nuestro interior. Me ha gustado ver que hay testimonios. El libro está salpicado, algo así de forma interactiva, de testigos, de gente que ha venido y ha vivido los resultados.
LM: Así es. Es que si quiero hacer algo con cara y ojos, lo que no puedo hacer es tirar la piedra y esconder la mano. Yo soy una persona, y la gente que me conoce aquí Vilassar lo sabéis, hace 35 años que tengo la empresa, soy una persona que doy la cara. Y a enfermos que han venido les dije que iba a hacer un libro, y hubo uno que me dijo: escucha y por qué no vengo a hacerte un testimonio. Y le dije que me parecía perfecto. Y me abrió la puerta a tener testimonios.
Ahora voy a hacer la presentación el día 5 de marzo en la Librería Alibri de Barcelona (C/ Balmes, 27) a las 19:00 h. Pues allí vendrán tres testimonios y seguramente hablarán o intentar que hablen. Y también vendrá uno que precisamente lo tenemos ahora, que con la colaboración del Hotel Vilassar, lo tenemos en el centro. Es un chico de Cassà de la Selva, y lo tenemos aquí haciendo el tratamiento de un tumor cerebral. Con prescripción médica y nosotros le hacemos todo lo que es la terapia natural.
Yo soy una persona, que mi trabajo me gusta que lo entienda la gente, pero de una manera clara, transparente, que sea el propio paciente el que diga: escuche yo entré allí y no ha sido nada que sea una broma. Que sea más serio de lo que pensamos. Porqué la terapia natural está muy desvitalizada. Pero es que ésta sólo es hacer el acompañamiento al enfermo, dándole las herramientas necesarias para que se cure. Porque es el paciente el que se tiene que curar. Que si el paciente se toma un vaso de leche, mal iremos. Le tenemos que decir: no se tome el vaso de leche, y entonces le demostraré por qué no hay que tomarlo. Y aquí es nuestro trabajo.
– JE: Leonor hablaba de honestidad y realmente en uno de los capítulos hace una demostración absolutamente sincera. Ella cuenta una historia real, un viaje que hizo a Egipto en un momento complicado de su vida, volvió aquí y había una araña que había quedado escondida en una chaqueta y la picó. Una picadura de aquellas malas y realmente podemos decir, que pasaste por momentos de salud complicados. Entonces decidiste: primero me quiero curar, y segundo me quiero curar de la manera más natural posible. Es decir, un ejercicio de honestidad. Que has practicado contigo misma. ¿Cierto?
LM: Ahora que me dices eso, aprovecho para explicar que antes de hacer cualquier terapia, esto mis amigos, familiares y conocidos, lo saben: la he probado yo antes. Y yo sé lo que pasa por ejemplo, después de hacer veintiuna hidroterapias de colon (una por semana).
¿Qué me pasó con la araña? Pues muy fácil, me picó una araña en el brazo izquierdo e hice un linfedema, que son 5 ganglios debajo del brazo. Y tuve la oportunidad de decir: me quiero curar, y aquí me demostraré el bis natura medicatrix de Hipócrates. Subí a 41 de fiebre, tengo de testigos los amigos y la familia, y con agua, limón y tomillo, durante un mes, llegué a curarme. Al final vino una gran amiga mía, que abría la mano y tenía unas bultos de pus y me iba pinchando la pus de las manos para sacar todo lo que tenía de tóxico dentro. Pero yo allí, volví a nacer. Coincidiendo que en mi juventud una pitonisa me dijo que me moriría a los 45 años. Pero no es que morí, es que morí para volver a nacer. Para volver a nacer la terapeuta que yo quería ser de ayudar a curar a la gente.
– JE: Y la familia te acompañó, en este proceso en el que las personas que amas están pasando por un mal momento y dices no: yo con agua, limón y tomillo lo conseguiré.
LM: Tuve grandes problemas porqué que ellos lo pasaban muy mal, lloraban y decían: pero es que te vas a morir, ¿que no lo ves? Y les dije que no, que yo quería llegar hasta el final. Porque tengo las ganas para poder hacerlo. Y lo conseguí.
– JE: Vemos que en ‘El sentimiento del intestino’ hay mucho interés, porqué haréis un recorrido por medios televisivos y comunicativos.
LM: Hay un interés bastante importante, el primero fue la editorial Ediciones Invisibles, de la editorial Viena, que apostaron por mí desde el primer día. Y yo me preguntaba qué tiene este libro. Y me dijeron que el libro está muy bien, pero la que lo tiene que defender soy yo, que es mi vida. Y además está clarísimo esto. Y así empezó todo. Y claro, nos han llamado de 8TV, de RAC 1, de diferentes radios y televisiones. Porque mi ilusión es dar a conocer todo esto.
– JE: Por supuesto que sí, y nosotros orgullosos de poderte tener en la que es tu casa. ¿Alguna novedad más, tienes pensado escribir un libro nuevo, alguna terapia nueva, algo que nos puedas adelantar?
LM: Bueno, ahora lo que estoy buscando es una casa, para poder aplicar los logros obtenidos en el estudio en el Balneario. Vemos que esto funciona y ahora es para dónde vamos, a tener nuestra propia clínica, por decirlo de alguna manera. Que será una casa rural con turismo-salud.
– JE: Agradecemos a Leonor Martín que ha venido amablemente a presentarnos ‘El sentimiento del intestino’. Un libro también tratado con absoluto respeto, hablando de temas pues que a la gente le pueden preocupar, también a conocer el intestino, conocer el funcionamiento de nuestro cuerpo. Le deseamos muchísima suerte y la despedimos sabiendo que probablemente a finales de marzo la volvemos a escuchar.
LM: Sí, el 26 de marzo estaré aquí en Vilassar presentando el libro y espero que a todos les guste. ¡Muchas gracias!