En el Centro SPAL creemos que, para ofrecer la atención más personalizada a las personas que se visitan en el centro, es necesario entenderlas en todas sus dimensiones. Por este motivo, es importante que, antes de iniciar ningún tratamiento, hagamos una valoración integral con Leonor Martín Monge.
La valoración integral consiste en determinar qué desequilibrios presenta la persona y sus niveles de toxinas, a partir de la experiencia de Leonor, la observación y las técnicas de última generación para la detección basadas en la medicina cuántica y bioenergética.
El diagnóstico bioenergético, a diferencia de la medicina alopática, no se fija sólo en los síntomas, sino que se observa la persona en su conjunto y se dedica una atención especial en busca del origen real de las enfermedades que, a veces no está en un desequilibrio físico, sino en un fuerte impacto emocional. Y, por este diagnóstico, es necesaria la sólida formación y experiencia de Leonor para evaluar en qué punto se encuentra la persona.
Esta primera visita no tiene una duración establecida, sino que depende de la persona y de sus necesidades. Y, a partir de esta primera visita, se establece el inicio del tratamiento con un acompañamiento personalizado, a través de diferentes métodos naturales, con el objetivo de empezar a desbloquear los canales de energía del cuerpo y prepararlo para sanarse.